Amalia Méndez y Sebastián Arévalo acudieron a la primera reunión sobre los avances en las investigaciones, a dos semanas de que se firmó el compromiso «Todos Somos Uno, desaparecidos de Nuevo Laredo».
Hace dos meses que la señora Amalia Méndez Rosales no sabe nada de su esposo, Juan Pérez, de oficio albañil y sus sobrinos Eloy Méndez, de 16, y Julio César Pérez, de 23 años, quienes lo acompañaron a Nuevo Laredo para ayudarle en su trabajo.
Ella y su familia acudieron a las instalaciones de la Fiscalía General de Justicia de Nuevo León (FGJNL), en donde se encontrarían también con personal de la Fiscalía de Tamaulipas con la esperanza de tener alguna noticia que les dé tranquilidad.
Ante la escasez de recursos que les impide buscar a sus seres queridos, tienen que esperar noticias de las autoridades, quienes afirmaron van muy lentas en las investigaciones.
Sebastián Arévalo hermano de Jorge Arévalo, uno de los ingenieros desaparecidos hace un mes en la carretera Monterrey-Nuevo Laredo, informó que en la semana pasada hubo tres días de búsqueda y en esta reunión les darían resultados de la jornada.
Esta es la primera reunión para mostrar avances de las investigaciones, a dos semanas de que se firmó el compromiso entre las fiscalías y el colectivo “Todos Somos Uno, desaparecidos de Nuevo Laredo” de darle seguimiento al tema y realizar juntas periódicas para informar a las familias.
En esta reunión participan por parte de Nuevo León el fiscal especializado en Personas Desaparecidas, Rodolfo Salinas, y la titular de la Comisión de Búsqueda, María de la Luz Balderas. Por parte de la Fiscalía de Tamaulipas se encuentra Elizabeth Almanza.
El colectivo que integra a familias de personas desaparecidas sigue buscando una audiencia con el presidente Andrés Manuel López Obrador para que atienda el caso y obligue al personal a dar resultados.
Fuente: Milenio
