Polémica por IA en castillo de Chapultepec

Ayer, el Castillo de Chapultepec lució con las banderas del Consejo Negro para avisar que este territorio pertenece a Rhaenyra (Emma D’Arcy) y Daemon Targaryen (Matt Smith) de cara a la guerra en contra de los Verdes en la temporada 2 de La casa del dragón, cuyo primer episodio estrenará el próximo domingo en Max.

Como lo hizo Lenny Kravitz para promover su disco Blue Electric Light interviniendo el Ángel de la Independencia para convertirlo en una guitarra colosal, el servicio de streaming usó inteligencia artificial para agregar las banderas Targaryen al edificio histórico de la capital.

Sin embargo, esto causó confusión y controversia en algunas personas, al grado de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) envió un comunicado para aclarar que la imagen es falsa y fue generada con un software.

Por lo que “llevará a cabo las medidas legales conducentes, debido a que se trata de un uso indebido de imágenes de un monumento histórico. En ningún momento se han colocado banderas, pendones ni ningún otro material publicitario relativo a dicha producción sobre este inmueble, y tampoco se ha autorizado la reproducción de imágenes de este espacio para la promoción de la serie. Lo que se aprecia en redes sociales fue generado a través de programas de edición de imagen o IA”, reveló la dependencia.

Excélsior buscó una postura más a profundidad por parte del INAH, pero declinó profundizar más allá del comunicado, mientras que Max tampoco tuvo comentarios al respecto.

Wario Duckerman, CEO de la compañía Brita Inteligencia Artificial, nos envió un análisis de lo que podría pasar en este caso en particular:

Es legal usar IA, porque no hay regulación; sin embargo, el INAH puede demandar a Max basándose en la Ley Federal sobre Derechos de Autor, que estipula que la imagen original del Castillo de Chapultepec está protegida por derechos de autor y que su uso y modificación sin autorización constituye una infracción y la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, que protege el patrimonio cultural de México y prohíbe la alteración de monumentos históricos sin autorización, independientemente de si la alteración es física o digital.

Daño a la imagen y reputación: el INAH puede argumentar que la imagen manipulada del castillo afecta su valor histórico y cultural, así como la reputación del monumento y del propio instituto.

Mientras que Max podría defenderse argumentando que la imagen generada por IA es una forma de expresión artística protegida por la libertad de expresión, que no se alteró el monumento físico ni se engañó al público, y que la falta de regulación específica sobre IA debilita los argumentos del INAH. Además, podrían alegar ‘uso justo’ al utilizar la imagen para promocionar una serie de ficción y destacar que la campaña contribuyó a difundir la imagen del Castillo de Chapultepec a nivel internacional”, explicó en el texto enviado a petición del diario.

Duckerman agregó que Max puede cuestionar la interpretación de la ley bajo el argumento de que no se contemplan representaciones provenientes de IA y que su campaña no daña la reputación del Castillo, “sino que lo presenta en un contexto creativo y ficticio, generando interés y atrayendo a nuevos públicos”.

Dada la controversia, Wario dijo que la regulación sobre inteligencia artificial que proteja el patrimonio cultural, fomente la creatividad y el uso artístico de monumentos para impulsar el turismo es necesaria.